Entro, saco el instrumento y toco. Toco, toco… toco por mucho rato. ¿Alguien se siente identificado con esta secuencia? Lo más seguro es que el 80 ó 90% de los músicos hagamos esto todos los días, varias veces por día.
Pero ¿qué pasa desde que armamos el instrumento hasta que comenzamos a tocar? Un estudio realizado de forma consciente, atendiendo a ciertas cosas antes de empezar a tocar, nos ayudará a tener un mejor rendimiento, obtener mejores resultados y disfrutar más. Como todo, al comienzo nos puede parecer aburrido e innecesario, pero después de 1 ó 2 semanas practicándolo, seguro lo incorporamos como un hábito y ya no tendrá sentido hacerlo de otra manera.
Nosotros, antes de estudiar
¿Estoy en óptimas condiciones físicas?
Suena básico, pero les prometo que he comenzado a estudiar sin pensarlo, y a los 5 minutos me doy cuenta que quiero ir al baño, que tengo un dedo con una pequeña herida o que me duele la cabeza; ninguna de estas cosas son compatibles con una buena situación de estudio. Atentos.